Para tí Isabel
Llegarán a tus ojos nuevas chispas,
como llegan cada primavera,
esas flores violetas,
que se esparcen como manto,
por un suelo sediento de ellas.
Volverá a llover en tu alma,
y nuevas alegrías y sentimientos,
recorrerán tus venas,
dando nuevo vigor a tu cuerpo,
haciéndote sonreír ante el espejo.
Ahora, disfruta de esa paz tardía,
que el tiempo te ha dado,
pon la alegría en tu semblante,
y dibuja en tus labios una sonrisa.
Nada va a poder contigo,
eres fuerte y apreciada,
como la madera de tu nombre,
y si el llanto te hace flaquear,
piensa en los días sufridos y tristes,
sonríe a los seres queridos,
sonríete a ti misma,
entonces caminarás sin miedos.