Me gusta así la vida,
entendida como un buen comensal,
ese buen vino que abre mis sentidos,
los aromas a frutas y maderas,
los colores,
infinitos tonos rojizos, violáceos,
los sabores que despiertan.
Untar en pan aquella salsa,
delicioso el sabor de esta carne,
que fresco esta este pescado,
que bien saben esas almejas.
Me gusta la vida así,
como me gusta esa joven,
que mueve sus caderas,
al ritmo de su música interior,
o el verde de aquellas hojas,
los pétalos morados de las violetas,
el color cárdeno de ese canario,
o el ombligo de esa mujer.
He comprendido que me gusta así,
transparente, nítida, diáfana,
como el agua de una fuente,
o el vino del tonel,
siempre moderadamente bebido.
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Oye pues mira que tienes buenos gustos tú...
ResponderEliminarUnos gustos exquisitos y un bello poema para el placer de los sentidos.
Besitos.
¿Y a quien no? Mas un poco de locura de vez en cuando no está nada mal no? jajaajaja
ResponderEliminarBicos mi poeta favorito, siempre cálidos y húmedos.
Campoazul si es que todos tenemos gustos exquisitos, uno de los míos es leerte.
ResponderEliminarBesitos
La locura en dosis pequeñas meniña Carmela, bicos calidos y humedos para ti :-)
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