No pienso en el camino que no hago,
ni en lo que pudo ser y no fue,
pienso en la vereda,
que juntos hemos hollado,
en los paseos sin rumbo,
por donde nos lleva,
aquel chucho famélico,
que no se sabe bien,
si nos sigue o le seguimos.
Pienso en ese pausado deambular,
por callejuelas encantadas,
de ciudades desconocidas,
admirando un balcón,
una aldaba centenaria,
me recreo en esa sonrisa tuya,
entre asombrada e ilusionada,
que hace que resalten más las nonadas,
con las que nos cruzamos.
Frágil, el tiempo se escurre,
se nos escapa entre los dedos,
transcurre absurdamente veloz a tu lado,
mientras veo alejarse, entre murmullos,
las sombras de las gentes,
como susurrantes fantasmas,
de una lejana realidad.
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Me gusta , me gusta..... gtan bracias por compartir tus escritos. un beso con sabor a café :-)
ResponderEliminarque diga es gracias carambas , meti mal el dedo.
ResponderEliminarGracias a ti, por compartir conmigo estos momentos, besos con sabor a cafe de Colombia:-)
ResponderEliminarFrágil el tiempo se escurre...
ResponderEliminarBicos cálidos y húmedos mi poeta favorito.
Así es Carmela y hay que robarle tiempo al tiempo.
ResponderEliminarBicos cálidos y húmedos meniña
Mejoras como los buenos vinos, Vic.
ResponderEliminarLas sidras en cambio tienen que ser de la añada, lástima :)
Ana tu eres añada unica, secaron los manazanos contigo :-)
ResponderEliminarBesos corazón :-)