Me miran tus ojos,
dulces, cálidos,
te miran los míos,
apasionados,
se sienten,
prisioneros de los tuyos.
Y yo a mi vez,
te quiero prisionera
entre mis brazos,
como esta mañana,
cuando coloqué,
esa flor en tu pelo,
y bajito te dije al oído.
Entre mis brazos,
bajo tus ojos,
tan solo quiero,
besar tus labios.
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Simple y dulce como el caramelo.
ResponderEliminarBiquiños cálidos y húmedos mi poeta favorito
Que belleza, tus poemas tocan sentimientos tal vez olvidados o escondidos, los hacen revivir para volver a desearlos..., eres un gran poeta.
ResponderEliminarBesitos.